Tiempo de cambios en el rugby argentino: el Interrio del país se aglutinó como nunca e impulsan con muchísima fuerza al tucumano Luis Castillo como nuevo presidente de la UAR. Antes de que eso pase, Porfirio Carreras charló con Rugby Fun y realizó un balance de su gestión.
El panorama del rugby nacional atravisa, desde los últimos años, un periodo de transición hacia un inevitable profesionalismo. Los escritorios de las oficinas de la calle Reconquista 150 no son ajenos. Por eso, a pesar de la voluntad de la URBA y de Lalo Galán, es muy posible que por primera vez la UAR tenga un presidente del interior.
En el mes en el que se definirá todo, Carreras miró para atrás y comenzó a sacar en limpio lo positivo y lo negativo de su gestión.
Se acerca el fin de mandato como máximo responsable de rugby argentino. ¿Qué balance puede hacer de estos años?
Yo creo que han sido muy buenos. De alguna manera ayudados por la gran participación de Los Pumas en el último mundial, eso nos dio viento de cola para poder realizar un montón de cosas. Por otro lado la comunidad internacional empezó a ver a la Argentina como una potencia del rugby y nosotros tuvimos que hacer la tarea de que toda la dirigencia y la estructuras acompañasen ese proceso que se dio fuera de la cancha.
¿Cómo fue ese camino?
Para eso hubo que solucionar algunos temas que teníamos pendientes, como salir de un concurso preventivo, pagar un deuda y poder tener ejercicios con superavit . Y además generar una confianza en todo el ambiente del rugby para los nuevos proyectos, dejando de lado temas del pasado y pensar en el futuro En ese sentido, elaborar la estrategia de la Argentina para los próximos años.
Fue un año con muchas novedades...
Hemos tenido muy buenas noticias de la IRB, en cuanto a apoyo que nos da para el desarrollo del rugby de alto rendimiento y del de base. Hoy la Argentina está siendo realmente ayudada para estar entre las diez uniones más potentes del mundo. Y lo que no toca a los dirigentes es hacer que nos tengan confianza en que lo vamos a poder hacer. Ellos nos van a ayudar en la medida que nosotros consllidemos los consensos internos para generar eso.
Se habla mucho de que en las próximas elecciones la URBA sería minoría por primera vez con respecto de las uniones del interior ¿Existen ríspideces todavía entre los dos polos?
No hay un conflicto de la URBA con el Interior. Obviamente en toda asociación es sano que se quiera tomar el mando y que haya gente que quiera plantear sus proyectos y presentar sus mejores candidatos. En este momento las uniones del Interior han presentado una lista y se sienten con el consenso necesario dado a un candidato; mientras que la URBA tiene dos figuras de buen nivel. Será el momento de consensuar con altura de parte de ambos lados cuál es la mejor gestión, los mejores hombres que puedan acompañar al presidente que salga electo y el rugby se debe encolumnar detrás de esa estructura. No la veo como una situación de conflicto, sé que se va a superar.
Dentro de la cancha, además de la atención que requieren Los Pumas, fue el año de nacimiento de los Jaguares. ¿Cómo se vivió esa experiencia?
Fue algo muy bueno, ya que los Jaguares han tenido una competencia muy amplia, prácticamente el doble de la que tienen Los Pumas. Son el producto del Plan de Alto Rendimiento y creo que cada vez va a tener más participación activa en las temporadas internacionales porque la Argentina debe generar sus jugadores de elite dentro del país y tratar que la mayor parte puedan estar disponibles para el torneo con los países de Hemisferio Sur.
¿Como toma la UAR la idea de la URBA de no permitir que los jugadores del Pladar no participen en sus clubes?
Hay que respetar las decisiones de cada unión. La URBA decidió eso y hay que respetarlo. Cada unión tiene su manera de ver las cosas. La URBA no está en contra del Pladar, solamente tiene una visión distinta de cómo convive una cosa con la otra. Igualmente no es un obstáculo insalvable para el plan.
* Fuente: Rugby Fun
El panorama del rugby nacional atravisa, desde los últimos años, un periodo de transición hacia un inevitable profesionalismo. Los escritorios de las oficinas de la calle Reconquista 150 no son ajenos. Por eso, a pesar de la voluntad de la URBA y de Lalo Galán, es muy posible que por primera vez la UAR tenga un presidente del interior.
En el mes en el que se definirá todo, Carreras miró para atrás y comenzó a sacar en limpio lo positivo y lo negativo de su gestión.
Se acerca el fin de mandato como máximo responsable de rugby argentino. ¿Qué balance puede hacer de estos años?
Yo creo que han sido muy buenos. De alguna manera ayudados por la gran participación de Los Pumas en el último mundial, eso nos dio viento de cola para poder realizar un montón de cosas. Por otro lado la comunidad internacional empezó a ver a la Argentina como una potencia del rugby y nosotros tuvimos que hacer la tarea de que toda la dirigencia y la estructuras acompañasen ese proceso que se dio fuera de la cancha.
¿Cómo fue ese camino?
Para eso hubo que solucionar algunos temas que teníamos pendientes, como salir de un concurso preventivo, pagar un deuda y poder tener ejercicios con superavit . Y además generar una confianza en todo el ambiente del rugby para los nuevos proyectos, dejando de lado temas del pasado y pensar en el futuro En ese sentido, elaborar la estrategia de la Argentina para los próximos años.
Fue un año con muchas novedades...
Hemos tenido muy buenas noticias de la IRB, en cuanto a apoyo que nos da para el desarrollo del rugby de alto rendimiento y del de base. Hoy la Argentina está siendo realmente ayudada para estar entre las diez uniones más potentes del mundo. Y lo que no toca a los dirigentes es hacer que nos tengan confianza en que lo vamos a poder hacer. Ellos nos van a ayudar en la medida que nosotros consllidemos los consensos internos para generar eso.
Se habla mucho de que en las próximas elecciones la URBA sería minoría por primera vez con respecto de las uniones del interior ¿Existen ríspideces todavía entre los dos polos?
No hay un conflicto de la URBA con el Interior. Obviamente en toda asociación es sano que se quiera tomar el mando y que haya gente que quiera plantear sus proyectos y presentar sus mejores candidatos. En este momento las uniones del Interior han presentado una lista y se sienten con el consenso necesario dado a un candidato; mientras que la URBA tiene dos figuras de buen nivel. Será el momento de consensuar con altura de parte de ambos lados cuál es la mejor gestión, los mejores hombres que puedan acompañar al presidente que salga electo y el rugby se debe encolumnar detrás de esa estructura. No la veo como una situación de conflicto, sé que se va a superar.
Dentro de la cancha, además de la atención que requieren Los Pumas, fue el año de nacimiento de los Jaguares. ¿Cómo se vivió esa experiencia?
Fue algo muy bueno, ya que los Jaguares han tenido una competencia muy amplia, prácticamente el doble de la que tienen Los Pumas. Son el producto del Plan de Alto Rendimiento y creo que cada vez va a tener más participación activa en las temporadas internacionales porque la Argentina debe generar sus jugadores de elite dentro del país y tratar que la mayor parte puedan estar disponibles para el torneo con los países de Hemisferio Sur.
¿Como toma la UAR la idea de la URBA de no permitir que los jugadores del Pladar no participen en sus clubes?
Hay que respetar las decisiones de cada unión. La URBA decidió eso y hay que respetarlo. Cada unión tiene su manera de ver las cosas. La URBA no está en contra del Pladar, solamente tiene una visión distinta de cómo convive una cosa con la otra. Igualmente no es un obstáculo insalvable para el plan.
* Fuente: Rugby Fun
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